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V CONCIERTO DE MARCHAS PROCESIONALES. ORQUESTA CFE. 06-04-2019

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Fotos cedidas por Manuel González Durán

V CONCIERTO DE MARCHAS PROCESIONALES EN HOMENAJE A LA SEMANA SANTA DE CABRA, POR LA ORQUESTA DE CUERDA DEL CENTRO FILARMÓNICO EGABRENSE, EL 6 DE ABRIL DE 2019.

Acercándose la Semana Santa, el Centro Filarmónico Egabrense rinde homenaje a la de Cabra, con un Concierto de Marchas Procesionales ejecutado por su Orquesta de Cuerda, que este año 2019 hace la V versión y que se ha celebrado el 6 de abril en la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán, a las 21 horas, con gran asistencia de público, que ocupó la hermosa nave del templo, en una noche que se presentó desapacible, lluviosa y fría en la iniciada primavera.

Organizado el concierto por la Cofradía de NP Jesús de las Necesidades, cuya imagen ocupó un lateral del altar mayor, se situó la Orquesta delante del presbiterio y desde allí “lanzó” su música a los asistentes, en un concierto que según palabras del director de la agrupación musical, Manuel Aguilar Aranda, en una nota del programa de mano, decía “que iba a cautivar por la sutileza, delicadeza y exquisitez con que se interpretan estas obras por una orquesta y estamos seguros de que, se deleitarán con tan bellas composiciones” lo que corrobora el cronista de estas letras, porque así fue realmente, según los aplausos y bravos (aunque estuviésemos en una iglesia) dirigidos a la orquesta y dirección, que certificaron este espléndido V Concierto.

Estuvo conformado, además de por la música por la palabra y así a la hora puntual prefijada, ya situada la orquesta, tomó la palabra un miembro componente de la misma, Mateo Olaya Marín, quien como presentador hizo un esbozo de cómo se iba a realizar éste concierto, así como un pequeño resumen de las obras, a modo de historia, que se iban a ejecutar, así como las poesías y saeta relacionadas con el evento.

Entremezcladas con las composiciones musicales, otro miembro del Filarmónico, Francisco Olmo Osuna, recitó varias poesías conexas con la música que se escuchó después y así oímos desde poesías anónimas a otras de conocidos vates como Manuel Benítez Carrasco, Francisco Montero Galvache y el poeta local José J. Delgado.

La parte musical, dirigida como siempre meticulosamente (igual que en los ensayos, en los que no deja “cabo suelto”), por Manuel Aguilar Aranda, se desarrolló así: Abrió, como en todos los conciertos y actos de Semana Santa en Cabra, con “La Cruz Parroquial”, pasacalle del músico egabrense, que fue director de la Banda de Música, M. López Cordón, con sus notas alegres.

En este concierto se han interpretado varias piezas cortas, muy solemnes, como Música de Capilla, que son denominadas “Saetas al Cristo del Silencio de Sevilla” del siglo XVII, de autor desconocido, aunque se atribuyen a Francisco de Paula Solís, de las que se hicieron las núms. 1-2-3-4-5 y 8, en un decir sutil, intercaladas con las marchas de procesión.

Las marchas que se tocaron, todas de las grandes, de las de repertorio, comenzaron con “Amarguras” del sevillano Manuel Font de Anta (1895-1936), compuesta en 1919, por lo que ya es centenaria, es una marcha fúnebre bellísima, considerada como el Himno de la Semana Santa. Perfecta ejecución orquestal.

Siguió una “Saeta” por Manuel Chacón, que fue dicha por seguidillas y cambio a martinetes, con gran categoría, una gran voz que nada tenía que envidiar a un tenor de ópera, en la que hizo distintos matices vocales.

Después la marcha “Saeta cordobesa”, también marcha fúnebre como la anterior, del jiennense de Jódar, Pedro Gámez Laserna (1907-1987), que es una preciosa joya de gran solemnidad, magnífica, una de las que más dificultad presenta en su ejecución. La orquesta la hizo con total pulcritud.

Tras ésta, la célebre “La Madrugá” (Abel Moreno Gómez) nacido en Encinasola (Huelva) (1944), marcha que describe la “madrugá” sevillana del Jueves al Viernes Santo. Su música es sencilla, agradable para el oído y de escasa dificultad para cualquier agrupación, pero hay que decirla bien. Se interpreta por diferentes conjuntos, desde grandes Bandas de Música, Orquestas Sinfónicas y un gran número de grupos como cuartetos, tríos e instrumentistas solistas. Aquí se hizo por un TRÍO: PIANO-Manuel Molina Carrillo-CHELO-Antonio Peña Ruiz-OBOE-Francisco Olmo Morales, en una versión única. ¡Qué decir! Todo lo que se diga es poco. PRECIOSA. DELICIOSA. BELLÍSIMA. EJECUCIÓN PERFECTA. La bordaron en su ejecución. “No se oía ni una mosca”. Los últimos compases fueron una explosión de bravos y aplausos, que atronaron en la gran nave del templo dominico, con todo el público en pie.

Englobada como Música de Capilla escuchamos después “Veracruz del Cerro”, una composición del director Manuel Aguilar, dedicada a la Virgen de los Remedios, que como las anteriores fue sutil su interpretación.

“Soleá dame la mano”, de Manuel Font de Anta, que también se interpretó, es una marcha fúnebre impresionante, de la que dijo el compositor ruso Stravinsky la famosa frase “Estoy escuchando lo que veo y viendo lo que escucho” en 1921 en la Semana Santa de Sevilla, presenciando la procesión de la Virgen del Refugio en la Puerta de la Carne. Fue otra ejecución perfecta de la Orquesta del CFE bajo la batuta de Manuel Aguilar.

Entre los grandes, no podía faltar nuestro paisano José Rodríguez López (1913-1995) y su marcha “Martirio” que la lleva todas las bandas en su repertorio, ha trascendido nuestras fronteras. La compuso el maestro en una situación de tragedia familiar, la muerte de su hermano Vicente en un accidente de tráfico. Fue otra obra de la noche dicha con igual perfección.

A continuación el director dio la bienvenida, como de costumbre, a cualquier nuevo miembro que se incorpore a la Orquesta y esta vez ha sido Hugo Pestana Vergillos, en percusión. También mencionó a dos colaboradores de la Banda de Música, para este concierto, Rodrigo Fernández Moreno (bombo) y Alejandro Chacón Marín (Platos).

Después se puso “A Jesús de las Necesidades” compuesta por Manuel Aguilar, hace 25 años en 1994, o sea era su XXV Aniversario y por tal motivo presidió el concierto, a quien estuvo dedicado, NP Jesús de las Necesidades y fue interpretada en su honor. Dentro de su composición, que sigue las líneas de estas obras de Semana Santa tiene un llamativo giro de una saeta y cierto aire triunfal. Enhorabuena al director de la orquesta por esta marcha que hace la 4ª de las que ha compuesto, que “se encuentra entre las más importantes de nuestra Semana Santa, por su belleza y calidad” (palabras de Mateo Olaya en la presentación). La orquesta siguió su tónica interpretativa.

El concierto finalizó con “Cofradías Egabrenses” de Francisco Moral León (1879-1956), fundador del CFE. Otro pasacalles “santo y seña” de la Semana Santa Egabrense. Muchos aplausos recibieron la Orquesta junto a su director en toda su actuación y ésta, en pie, correspondió a los finales que les prodigó el público.

Tras la música, el Hermano Mayor de la Cofradía de NP Jesús de las Necesidades, Alejandro Cabrera, entregó varios reconocimientos al Presentador, Director de la Orquesta, Presidente del CFE y Presidente de la Agrupación General de Hermandades y Cofradías de Cabra, por la colaboración en el Concierto, dando las gracias a la Orquesta y asistentes al concierto.

Rafael Nieto López.